El 30 de mayo Daniel Agostini toco en el teatro Colonial de Avellaneda. Eso ya es nota, pero también lo es recorrer junto a él, a propósito de este recital, lugares especiales en los que actuó a lo largo de su exitosa carrera. Hablamos de presentaciones al margen
de los bailes, que es lo común y que en el caso de Daniel no alcanzaría un libro o hasta podría desbordar el disco rígido de una compu para registrarlos todos. Agostini, un tipo que sabe contar cosas, habló de esto y también hizo un poco de historia, repasó el presente y dejó mensajes para el futuro.
“Sin contar los bailes toqué en lugares lógicos, digamos, pero también en otros que pueden resultar muy llamativos. Canté en Anillaco, en tiempos de Carlos Menem, en cancha de River para el cierre de campaña de Kirchner. Estuve en Fiestas Patronales de todo tipo, del durazno, de la manzana, de la guitarra, de lo que quieran. Toqué en inauguraciones de calles y autopistas, también a beneficio, por ejemplo en el hospital
Garrahan y dentro de poco voy a dar un recital en el Sagrado Corazón, en el Camino de Cintura. Hice un Luna Park y unos 10 Gran Rex, sumo 15 años de trayectoria, 3 con Sombras, 12 como solista y hay proyectos de hacer discos de distintos géneros, además de seguir con la agencia Agostini Producciones, que viene muy bien, felizmente”.
“Me han sucedido cosas maravillosas. Desde las más grandiosas hasta las más simples, como aquella mañana en la que mi viejo me acercó la radio porque esta sonando mi primer tema con Sombras y así como estábamos, en calzoncillos, nos abramos con él y con mi mamá. Nosotros somos muy sensibles, lo mismo mis dos hermanas, y no olvidamos nunca esas pequeñas grandes cosas de la vida”.
UN GROSOOO
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